Eres igual a ti, y desigual, lo mismo que los azules del cielo.

Juan Ramón Jiménez


miércoles, 25 de enero de 2012

PRESENCIA EN LA AUSENCIA

Imagen: Sophie Thouvenin




A Miguel, y su manera de estar presente en su ausencia



Lágrimas,
fragmentos de alma
cayendo sobre el día
en cuajos de otoño
Hacerse pedazos
Romperse
Herir pájaros de pena
Campos sembrados de desesperanza
Quise asirte
con todas mis fuerzas
pero te llevaron
a ese lugar del que nadie regresa
Me legaste
partículas de muerte bajo las uñas,
fibras de olvido,
el fúnebre cantar de una campana,
la insípida atonía de un punto de encuentro
ubicado en un rincón de la nada
Te llevaste tus ojos,
tu sonrisa,
aquella manera que sólo tú
tenías de llamarme
A veces
-sólo a veces-
el viento viene preñado
de tiernos retoños de tu voz
Tatuando en mi corazón
una brisa de mariposas,
un rumor a rocío






lunes, 23 de enero de 2012

AISLAMIENTO

Paolo Franco Orlando: Isolamento numero quattordici: si sfidano



Y río
estentórea
mientras oteo la nada,
tiemblan pupilas
emergencia de la imagen
-rasga el iris la lágrima-
se pinta el día de mar
Eyaculo
feroz
palabras desoladas
como estepas
Ordeño mis enormes pechos
y apenas
una mísera gota de calostro
Abomino a gritos
la propia esterilidad
¿Es fútil todo intento de hallar al otro?
¿De hallarme en el otro?
Doy cabezazos contra tu torso
en catapulta
Me precipito suicida
hacia tus murallas
sólo para contemplar
el corazón
que guarecido
tras ellas
late
 

viernes, 20 de enero de 2012

COSAS BONITAS





Te miro,
en mi cuerpo
florecen
auroras,
cantos de pájaro

Amor,
bullicioso avispero
Mi vientre,
derrota consagrada

jueves, 19 de enero de 2012

EL PEZ

Imagen Sophie Thouvenin





Por momentos
me siento un pez
viviendo en la cárcel líquida
de su pecera
al que una mano frenética
arroja sin preaviso al mar
El pánico
Él vértigo
El temblor
Dislocarse las branquias
en la caída
Atesorar
cada gota de la libertad del océano
una vez de vuelta a mi prisión de cristal



miércoles, 18 de enero de 2012

OFELIA

Estudio para Madonna de Caracas (Homenaje a Ofelia) de Nelson Garrido





El cuerpo partido
en mil primaveras
La luna la corona
–mano blanca enguantada-
con su halo mortuorio

-reina
se balancea
blandamente
en su trono de agua-

Serpientes de flores la jalean
con el lamento sibilante
que se debe a los ahogados

-pero esto es
antes de que su cuerpo se hinche
y encuentren un congrio en su vientre abierto
sobre la metálica mesa de autopsias-


martes, 17 de enero de 2012

EL VIENTRE DE MI LOCURA

The womb of my madness de Paolo Franco Orlando




Tu cuerpo cayó sobre mí en lluvia serena. Cristal desnudo en la intemperie de la noche,  sentí el agua deslizándose, desgranando luminarias sobre la piel.  Y a la vez, lejana, escuchaba el repiquetear de las gotas, y trataba de penetrar el misterio insondable de tus manos- por momentos, al amar me desdoblo, y me cuelgo del techo como una cometa sin carrete-. Tú hacías música sobre mí, y en algún lugar que siempre estuvo seco brotó la voz de un arroyo. En otro lugar también murió una mariposa, resquebrajada por el retumbar de tu sexo en el mío, como la quilla de un galeón que embiste desmembrando la ola. Después de la fina lluvia hacemos de nuestro lecho un mar en el que nos sumergimos, para emerger a su superficie unidos ventralmente, del mismo modo que lo hacen en su cópula las ballenas jorobadas. ¿Cuánta belleza puede existir a la vez en el mundo? ¿Cuánta felicidad? ¿Cuánto dolor? Quizás mientras nuestra animalidad retoza, la luna derrama una lágrima plateada. Quizás este viejo planeta no pueda sostener el peso de muchos corazones inflamados como el nuestro. Quizás ni siquiera sobreviva al calor de nuestros dos corazones incendiándose. Y, por eso mismo, todo esto no hubo de ser más que un sueño. Aunque ahora corra ciega hasta el lavabo, a lavarme las lagañas del sexo en torno a los ojos.... Es locura, pero sí, que no estemos juntos quizás sea un acto de supervivencia de este viejo mundo. Y en nombre de ésta ¿a cuántos amantes habrá separado????

lunes, 16 de enero de 2012

PLAÑIDERAS

Imagen: Lev Chitovsky




A veces me desubico
y no existe espejo
que devuelva mi imagen,
ni garganta
que articule mi nombre
A veces
no soy más
que una chaqueta de hombreras
sobre la carne de una silla,
una casa hospedando
jaurías de corrientes de aire
A veces
soy incapaz
de palpar el rostro
que se oculta bajo esta máscara
y ya no leo mi designio en la lluvia
y olvido el lugar del corazón

Hoy
una voraz paloma
se alimentó
de las migas que habías sembrado
para llevarme hasta ti
y la piel se me quedó colgando
-despojo-
 en una zarza
-cuando llega el otoño
siempre añoro el sabor de las moras-
A veces
en esta ausencia de ti
mi cuerpo hiberna



 Imagen: Lev Chitovsky


Quién será aquél
que habrá de lustrar
el cuerpo que se oculta
bajo tanta herrumbre