Voy
con mi hatillo de silencios,
una bandada atraviesa
fregando el cielo que por dentro me llueve,
pavimenta aceras la sombra de sus alas,
movimientos musicales
anclándose al pentagrama de mi andar.
Caja de resonancia
amplificando el sonido de la vida
soy.
El lobo agazapado en mi poema
precisa de la luna para aullar.